Ingredientes Alimentarios
Desde el año 2.000 nos dedicamos a la venta de ingredientes y aditivos para Industria agroalimentaria, somos representantes de los mejores productores y llevamos a los mejores fabricantes de alimentos, los mejores materiales, nuestro trabajo consiste en buscar ingredientes y aditivos alrededor del mundo, con el objetivo, de ofrecer productos de calidad, con el máximo nivel de seguridad alimentaria y al menor costo posible. Desde nuestros inicios hemos buscado convertirnos en ese “partner” del que sabes que nunca falla.


Nuestros servicios
- Proveedor integral.
- Amplia gama de productos.
-
Todos los formatos: industrial, hostelería y alimentación.
- Calidad total.
- Tarifas muy competitivas.
- Eficaces y eficientes.



APLICACIONES
La flexibilidad logística y comercial de nuestra empresa nos permite suministrar a una gran variedad de empresas y sectores industriales, independientemente de su tamaño y volumen de producción. Estas son algunas de las aplicaciones habituales:
- Industria de la alimentación.
- Industria Cárnica.
- Química.
- Tratamiento de aguas.
- Panaderías y pastelerías.
- Envasadores de azúcar.
- Bodegas y cavas.
- Ecológico.
- Fábricas de alimentación animal.
- Deshielo





NUESTRO COMPROMISO
Desde Ingredientes Alimentarios nos implicamos en la Excelencia, a través de la satisfacción de nuestros clientes, estableciendo relaciones transparentes, honestas y duraderas, que aporten beneficios a nuestras compañías, no solo en el desarrollo profesional de nuestros proyectos, también en el crecimiento personal, mejores profesionales y mejores personas.
Para empezar a describir nuestro proyecto, tenemos que explicar que son los ingredientes y los aditivos alimentarios,
INGREDIENTES: Es cualquier sustancia, incluidos los aditivos alimentarios, empleada en la fabricación o preparación de un alimento y que permanece en el producto final, aún en forma modificada;
ADITIVOS ALIMENTARIOS: Las sustancias que se añaden a los alimentos para mantener o mejorar su inocuidad, su frescura, su sabor, su textura o su aspecto se denominan aditivos alimentarios. Algunos de ellos se llevan empleando desde hace siglos para conservar alimentos, como ocurre con la sal (en carnes como el tocino y los pescados secos), el azúcar (en las mermeladas) y el dióxido de azufre (en el vino).
La utilización de aditivos alimentarios solamente está justificada si responde a una necesidad tecnológica, no induce a error al consumidor y se emplea con una función tecnológica bien definida, como la de conservar la calidad nutricional de los alimentos o mejorar su estabilidad.
Estas sustancias se pueden obtener de plantas, animales o minerales o producirse sintéticamente. Se añaden de forma intencionada con un determinado propósito tecnológico para dotar al alimento en cuestión de características que los consumidores suelen identificar con él. Actualmente se utilizan cientos de miles de aditivos con funciones específicas que permiten que los alimentos sean más inocuos o tengan un mejor aspecto. La OMS y la FAO dividen estas sustancias en tres grandes categorías basándose en su función.


